viernes, 16 de mayo de 2008

La Rosa de Jericó.


La Rosa de Jericó (Rosa Hiericontea) es una planta que crece en los desiertos de Arabia y en las inmediaciones del mar Rojo. Desde tiempos remotos se utilizaba como elemento adivinador del clima, ya que al ser un vegetal higrómetro, el sabio o chamán, pronosticaba con acierto la predicción del tiempo. En tiempo seco la planta permanece completamente cerrada; en tiempo húmedo, se abre con lentitud; si amenaza lluvia, se abre de manera muy vistosa y con más o menos rapidez según sea la proximidad de descarga de las nubes.

Es una planta con raíces muy pequeñas por lo que es fácil que el propio viento la levante y la arrastre grandes distancias a través del desierto.

Según la tradición, esta planta tiene la gran propiedad de transformar las energías negativas en energías positivas.


Algunos pensaréis que no pinta nada aquí un artículo de botánica, pero es que esta planta lleva asociadas una gran cantidad de leyendas desde hace centenares (y miles) de años.La rosa de Jericó (Anastatica hierochuntica) es una planta bastante próxima a la familia de los helechos que habita en muchas zonas de Arabia, Egipto y Palestina. Esta planta no posee grandes raices, por lo que se desplaza constantemente llevada por el viento (su forma de pelota lo facilita). La gran curiosidad que se asocia a esta planta es que se trata de una especie de higrómetro natural: mientras el tiempo es seco se mantiene seca y con forma de pelota, pero con la humedad se va abriendo poco a poco y recuperando el color verde. Es una especie de lo más resistente, ya que puede mantenerse dentro de un acuario completamente sumergida sin que se muera.

Como he comentado al principio esta planta lleva muchos siglos formando parte de muchas leyendas e historias:Según cuentan algunas leyendas una de estas plantas rodaba siguiendo a Jesús por el desierto. Una mañana Jesús se levantó muy sediento, y al encontrar a su lado esta planta que había acumulado la humedad nocturna se la acercó a la boca y bebió las pequeñas gotas que cayeron de ella. Después de esto, se dice que Jesús bendijo esta planta.Algunos interpretan su aparición en la mismísima Biblia: durante el éxodo de Moisés con el pueblo hebreo, hubo muchos días de desesperanza. En uno de ellos el pueblo se quejó de la falta de agua, ya que el agua más próxima no era potable. Dice la Biblia que Moisés arrojó un madero (o tronco, según la traducción) y el agua se volvió potable. Algunos interpretan que este tronco podría ser en realidad una rosa de Jericó, ya que se le atribuyen algunas propiedades medicinales.Otra de las historias que se cuentan sobre esta planta es que la mismísima reina de Saba se bañaba en una bañera llena de rosas de Jericó, y que gracias a eso conservó una extraordinaria belleza y una piel muy joven hasta su muerte.A parte de todas estas historias y leyendas, como siempre ocurre en estos casos hay una base histórica. Está documentado que los chamanes utilizaban estas plantas para predecir tiempos de bonanza, ya que en esas épocas la bonanza iba ligada al clima, y esta planta es una buena indicadora de las lluvias.Actualmente se le atribuyen muchas propiedades. Una de las más "místicas" es que si se mantiene esta planta en nuestra casa atraerá las energías positivas y nos traerá paz, felicidad y bienestar económico.Aparte de estas propiedades "intangibles", está demostrado que las rosas de Jericó tienen algunas propiedades medicinales (lo que proporciona una base científica a gran parte de las historias contadas sobre ella).Si a alguien le interesa leer más acerca de la historia y leyenda de esta planta, le recomiendo leer el libro La Rosa de Jericó - Evlex - , de Francisco Martos.

También podéis visitar su web: http://www.larosadejerico.com/


No hay comentarios: